En apenas cinco temporadas en las Grandes Ligas, el venezolano Jesús Luzardo no ha podido desplegar todo el potencial que lo llevó a ser uno de los principales prospectos de todo el béisbol hace algunos años. Inconsistencia sobre la loma y problemas físicos han sido los grandes culpables de ello, pero en una contienda en la que el zurdo parece haber dejado atrás la primera parte del problema, los Marlins de Miami harán todo lo que esté de su lado para evitar que la segunda porción vuelva a causar estragos sobre el serpentinero.
El mánager Skip Schumaker y el resto de su cuerpo técnico han establecido un plan de trabajo para Luzardo rumbo al resto de la segunda mitad de la campaña, con miras a proteger el estado físico del escopetero, que ya sobrepasó su marca previa de entradas lanzadas en una misma zafra, a pesar de que todavía el mes de julio no está cerca de concluir. Con 113 capítulos y un tercio de labor tras sus 20 aperturas iniciales del torneo, el siniestro dejó atrás su récord previo de 100.1 entradas sobre el ruedo, que recopiló en 2022.
Tras resumir su calendario luego de la celebración del Juego de Estrellas, los Marlins dieron una muestra de la estrategia que manejarán con respecto a Luzardo de ahora en adelante. Schumaker no le asignó al criollo ninguno de los juegos del equipo durante el pasado fin de semana; en su lugar, lo envió a la lomita para el cotejo del lunes ante los Cardenales de San Luis, ocho días después de su última presentación.
Con cautela, pero sin lesiones
«Estábamos intentando protegerlo tanto como pudiéramos debido a la cantidad de innings que ha lanzado anteriormente en su carrera y los que lleva hasta ahora», le comentó Schumaker al portal oficial del combinado. «Va a aplastar la cifra de más innings lanzados que tenía hasta este año. Con el Juego de Estrellas, tratas de dar un tiempo más prolongado, no para que se recupere porque no está lesionado, pero sí para que descanse», agregó.
Sin embargo, algo con lo que también deben tener cautela los peces es con no interrumpir la dinámica tradicional de los lanzadores, que suelen ser criaturas de hábitos. El descanso adicional que recibió el venezolano pareció afectarlo en su duelo frente a los pájaros rojos el lunes, en donde apenas trabajó por espacio de cuatro episodios, con cinco incogibles y tres anotaciones (dos limpias), además de un trío de pasaportes y dos guillotinados.
Jesús Luzardo, Painted 91mph Changeup. 🖌️🎨✝️🦎 pic.twitter.com/Yn3EMF4OvF
— Rob Friedman (@PitchingNinja) July 18, 2023A pesar de que la faena fue inusual para un Luzardo que había trabajado por lo menos seis innings en cada una de sus cinco apariciones previas, el exprospecto aseguró que no se trató de un problema relacionado con el descanso extra.
«No tuvo nada que ver con tomar tiempo de descanso o algo así, sino con que me sentí fuera de sincronización con mis mecánicas«, explicó el brazo. «Eso no debería pasar, en especial después de la última serie. Sentía que necesitaba venir y lanzar bien para nuestro equipo. Y estoy un poco frustrado de que no pude hacer eso».
Luzardo atrapado en el peor escenario
La tasa de boletos por cada nueve entradas que registró Luzardo (2.2) en la etapa inicial de la temporada fue la más baja de su carrera como ligamayorista, pero en su apertura contra San Luis el escopetero tuvo problemas con el agarre de la pelota, quizás como resultado de la humedad. De cualquier forma, su slider y cambio no estaban cayendo en la zona.
«Si esos dos pitcheos no me están funcionando, entonces básicamente estoy atrapado solo con la recta y ese es un lugar en el que nunca queremos estar«, admitió Luzardo. «Sentí que incluso con la bola rápida no tuve el mejor control. Estaba como resbalándose de la mano y siento que necesito ser capaz de controlar más mis envíos quebrados. Eso me ayuda a poder regresar la recta a la zona de strike», cerró.