La temporada de Pedro Ávila en la sucursal Triple A de los Padres de San Diego culminó por todo lo alto. En septiembre dejó récord de 3-0, con efectividad de 3.00 en 27 innings de labor con El Paso, lapso en el que además ponchó a 30 rivales y exhibió WHIP de 0.85.
El dominio del abridor diestro se asentó con el transcurrir de la campaña. Aunque lo llamaron a la Gran Carpa con los religiosos, tan solo actuó en cuatro episodios, divididos en dos presentaciones como relevista en abril.
En mayo fue bajado a la granja texana de los frailes, pero dejó promedio de carreras limpias de 8.44, sin poder apuntarse victoria alguna y sufrir un revés en cinco aperturas durante el período. A partir de allí, repuntó y se consolidó como el sólido iniciador que ha sido durante su trayectoria en la organización.
Balance de 7-0 desde junio hasta el culmen de la zafra (con otro trío de triunfos en junio), efectividad de 3.77 y 101 recetados en 93 entradas, para superar por primera vez los 100 capítulos globales de trabajo (116 en total) desde 2018.
Con esa versión suprema de Ávila esperan contar en Bravos de Margarita a partir de próximos días.
«Tomé un mes de descanso, porque esta temporada fue de mucho trabajo extra. Me estoy preparando fuerte físicamente y espero dar buen espectáculo cuando me reporte», mencionó el escopetero al departamento de prensa del equipo.
Una temporada de aprendizaje para Pedro Ávila
El caraqueño de 25 años de edad ya acumula tres breves pasantías en cursos distintos (2019, 2021 y 2022) con los Padres de San Diego. Solo cuatro presentaciones y 13.1 tramos, pero lo realizado en la reciente temporada tiene una gran importancia para Ávila, sobre todo si se toma en cuenta que en 2020 fue sometido a la operación Tommy John y en 2021 trabajó 40 innings menos.
“Fue una temporada de altos y bajos, la describiría como la campaña en la que más aprendí. Gracias a Dios, a mi perseverancia y horas de trabajo duro pude terminar muy fuerte los últimos dos meses, de verdad, fue muy buena”, admitió el escopetero.
En la Liga Venezolana de Beisbol Profesional tiene experiencias en dos torneos con los insulares. En 2018-2019 dejó minúscula efectividad de 0.89 en 20.1 episodios divididos en cuatro aperturas, con récord de 1-0 y un juego completo incluido, además de 25 guillotinados.
Durante el certamen pasado solo tuvo dos presentaciones (registro de 1-1), con tres rayas admitidas en 12 entradas (PCL 2.22).
“Como siempre, voy jugar fuerte, duro, con mucho respeto al juego, a los otros equipos y, principalmente, a Bravos de Margarita. Esperen en cada juego que yo lance el 100% de mí, que la gente lo sepa, es lo que traigo”, afirmó.
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