Para el beneplácito de los amantes de la disciplina del softbol y sus distintas modalidades, se cerró con éxito la vuelta del softbol fueteado con sus máximas figuras a territorio guatireño, en especial a Valle Arriba, epicentro del campeonato conquistado por la divisa Chimuelos SBC.
El softbol en Guatire, población mirandina ubicada al este de Caracas, volvió a ser sede para que las grandes figuras de softbol nacional se dieran cita en un torneo bajo la modalidad «fueteado» y que contó con la participación de cinco equipos: Novatos del INTT, Elocar, Halcones, Patriotas y el ala postre campeón Chimuelos SBC.
Chimuelos y Patriotas final esperada
Luego de dos emocionantes rondas de todos contra todos y despachar fácilmente a sus distintos rivales en semifinales, ambos equipos correspondiendo al pronóstico de los fanáticos compitieron en una final más que deseada.
Patriotas arribo a su tercera final consecutiva con dos títulos acuestas, entre ellos el de campeones del Fastpitch en la Liga del municipio Zamora, categoría máxima de la disciplina y casi en simultáneo, lograron vencer a Novatos del INTT en un circuito aledaño. En ambas series vinieron de derrotas en el primer compromiso, para luego ganar dos y llevarse la corona.
Los dirigidos por Jorge Luis Bastidas se mostraron competitivos durante la campaña, con un grupo homogéneo donde existió un héroe distinto en cada jornada, sin embargo, los aportes de Alejandro Pérez, Enderson Abad, Jesús Ochoa y la presencia del estelar Jesús Abreu, Luis García y Rossmel Hederick como lanzadores aportó muchísimo al equipo patriótico.
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Por su parte, Chimuelos, una organización que se estrenó por todo lo alto en la disciplina, tuvo una profundidad en su roster que marcó diferencias, destacando jugadores de talla internacional tales como: Erwin Díaz, Maiker Pimentel, Luis Morales, Jeison Torrealba, Jose Dorante y Gaby Martínez. Sin olvidar la presencia del mejor lanzador en la actualidad de la modalidad en Venezuela, Cesar Magallanes y los aportes de jugadores como Jorge Espinoza, Jose Caldera, Wilfredo Brito y Edgardo Martínez.
Bajo las órdenes del reconocido técnico del softbol nacional Neomar Blandin, acompañado del emblemático Ali Berroteran y la Gerencia de Carlos Pineda, el equipo estaba destinado al éxito y el éxito fue encontrado.
Jeison Torrealba y Gaby Martínez comandaron el primer triunfo
Los lanzadores del equipo Chimuelos coparon la escena al combinarse para dejar en blanco a su rival durante la final. Jeison Torrealba tomo la pelota por Chimuelos para ese primer duelo y logro la victoria en brillante enfrentamiento ante el fajador Jesús Abreu.
Ese encuentro finalizó con marcador de 4-0 siendo importante para el equipo Chimuelos la defensa de su shortstop Gaby Martínez con par de intervenciones brillantes a la defensiva, más soberbio cuadrangular sepultó las aspiraciones del rival.
Luis Morales también se sumó a la fiesta y despacho par de extrabases, entre ellos un cuadrangular solitario, suficientes para pegar primero en la gran final.
Un hermético Cesar Magallanes concreto la barrida
Luego de relevar con dominio en la séptima entrada del primer duelo, fue destinado por Neomar Blandin como abridor para el segundo de la serie y no desentono. Magallanes lanzó por espacio de cuatro entradas en blanco, permitiendo solo un indiscutible, ponchando a siete contrarios y así sellar el título.
La ofensiva explotó a los lanzadores del equipo Patriotas, fabricaron hasta 11 anotaciones, destacando los bates de Luis Morales con jonrón y hit, con los cuales remolcó hasta cinco rayitas; otro que la vio clarita fue Jose Dorante con cuadrangular y doble en tres turnos al bate para traer otras dos anotaciones.
Los tres últimos out fueron conseguidos por Jeison Torrealba, desencadenando la celebración del equipo en el terreno por la victoria 11-0 y consecución del primer título de la divisa en la modalidad.