Carlos Carrasco realizó una sesión de bullpen el jueves, en lo que significó su primer arribo a la loma desde que fuese ingresado a la lista de lesionados de 15 días por los Mets de Nueva York, debido a una inflamación en el codo derecho causada por una astilla de hueso.
El lanzador derecho dijo «sentirse bien» tras la actividad, de acuerdo con un reporte de Anthony DiComo, aunque el periodista no dio una fecha estimada para su regreso, CBS Sports indicó que podría volver a la rotación del equipo a principios de mayo.
Carrasco recibió una inyección de cortisona el 19 de abril, cuatro días después que las molestias en el área afectada se intensificaran luego de su tercera apertura de la temporada. El tratamiento podría ser una de las últimas esperanzas del cuerpo médico metropolitano para evitar que el venezolano tenga que pasar por el quirófano, como ya lo hizo en 2021 por una lesión idéntica.
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Carlos Carrasco mejora de su dolor
Carrasco fue castigado en sus dos primeras presentaciones de la campaña, pero el punto que mayor preocupación causó fue la disminución en la velocidad de su recta, de 93,2 millas por hora a 91 millas por hora. El mánager Buck Showalter se encargó en su momento de restarle importancia al asunto, al mencionar que pudiera ser algo normal debido a la edad del criollo -tiene 36 años-, pero las molestias posteriores, prendieron las alarmas.
El barquisimetano compiló promedio de carreras limpias de 8.56 en sus tres primeras apariciones de la zafra. Sin embargo, registró una mejoría en la más reciente, la del 15 de abril, cuando laboró cinco entradas y permitió sólo dos carreras, con tres ponches a su cuenta.
Fue luego de ese compromiso ante los Atléticos de Oakland, que el brazo del larense generó la zozobra. Si todo sigue igual de bien como se conoció este jueves, quizás sólo quede en un susto y el experimentado serpentinero vuelva mucho más pronto de lo esperado a un montículo de Grandes Ligas.