Cinco toleteros venezolanos, titulares todos en sus equipos de Grandes Ligas, entrarán al tercer mes de temporada morosos para una categoría muy relevante hoy por hoy para analizar a los bateadores: las carreras creadas ajustadas (WRC+), estadística ofensiva con una escala parecida al OPS ajustado con la cual se pretende tasar el aporte con el madero tomando en cuenta factores externos, como las características del estadio donde juega o las tendencias del circuito.
Como el OPS ajustado, el WRC+ (usado por respetados portales estadísticos como Fangraphs) le asigna valor de 100 a los artilleros considerados promedio, más de 100 a quienes superan la media y menos de 100 a los rezagados.
Los criollos con juego regular que van aplazados hasta ahora son el campocorto de los Rockies de Colorado Ezequiel Tovar (40, vale decir, sesenta por ciento inferior a la medianía), el catcher de los Nacionales de Washington Keibert Ruiz (76), el segunda base de los Guardianes de Cleveland Andrés Giménez (77), el antesalista de los Marineros de Seattle Eugenio Suárez (90) y el receptor de los Cardenales de San Luis Willson Contreras (90). Tovar, Ruiz y Giménez aparecen entre los quince con peor WRC+ durante 2023.
Para tener una idea de las proporciones, el cañonero más destacado de la zafra en este apartado es el cubano Yandy Díaz, con 195. Le sigue Aaron Judge, con 173. El criollo mejor evaluado en el rubro es Ronald Acuña Jr., octavo con 158.
De este quinteto, quien, al menos teóricamente, goza de mejor perspectiva para despegar es, vaya ironía, el que está bateando peor hoy día: Willson Contreras.
Indicadores alentadores para Willson Contreras
El careta de 31 años de edad atraviesa un macabro slump. Lleva 25 turnos seguidos sin conectar imparable y apenas suma cinco hits en sus últimos 50 turnos, para promediar .100 durante ese calvario. No obstante, hay indicadores alentadores.
Uno es su propio pasado. De los cinco venezolanos con WRC+ bajo 100, Contreras ha sido el bateador más probado. Ya son ocho sus temporadas arriba y su OPS ajustado vitalicio es 113, luego sobre la media. Pero datos del presente también abogan por él. Contreras se sitúa duodécimo de las mayores, y sexto para la Liga Nacional en % de conexiones contundentes, que salen disparadas a 95 millas por hora o más. 43% de sus contactos salen con potencia, así que, tarde o temprano, deben encontrar su camino hacia tierra de nadie.
Según Baseball Savant, Contreras aparece en el percentil 83 en velocidad promedio de partida de sus batazos. Quiere decir que solo 17% de sus colegas están aporreando la bola con mayor reciedumbre. Podemos verlo en el percentil 99 en velocidad máxima de salida. En el percentil 82 en porcentaje de hits sacudidos con autoridad y en el 71 para la tasa de barrels, los sablazos que, por su fuerza y ángulo de salida deben garantizarle al aporreador promedio de .500 y slugging de .1500.
El Babip, o promedio sobre pelotas puestas en juego, sugiere que Contreras ha tenido el santo de espaldas: .267. Y está generando menos rollings que en 2022, cuando su WRC+ fue un estupendo 132.
Los dígitos esperados para el carabobeño, habida cuenta de la forma como está impactando la pelota son superiores a los plasmados en la hoja. Si le tienen paciencia (Contreras ha estado en el ojo del huracán dentro de los Cardenales) pronto deberíamos presenciar un renacer.