El tour de despedida de Miguel Cabrera continúa. A pesar de que el venezolano había señalado antes de que empezara la vigente temporada que no deseaba recibir ningún tipo de trato especial en su último año como pelotero profesional, el impacto que ha generado el toletero a lo largo de su trayectoria hacía imposible que el resto de los conjuntos de las Grandes Ligas lo dejaran despedirse sin agradecimiento. A comienzos de esta semana, los Filis de Filadelfia tuvieron la oportunidad de recibir por vez final al maracayero y se vistieron de gala para la ocasión.
Cuando Cabrera visitó la ciudad por primera vez en 2003, las cosas eran muy distintas. Apenas era un novato que cubría el jardín izquierdo para los entonces Marlins de Florida y muy pocos podían imaginar que terminaría recolectando números que lo harían una apuesta segura para el Salón de la Fama de Cooperstown. De hecho, el criollo es el último pelotero que todavía se mantiene activo de los que llegó a disputar un encuentro en el antinguo Veterans Stadium.
«Increíble. En verdad es uno de los mejores bateadores derechos en la historia del juego, si es que no es el mejor«, le comentó el mánager de los cuáqueros, Rob Thomson, a la prensa norteamericana. «Cuando estuve en Nueva York, jugamos ante ellos mucho. Él parecía ser un out difícil en cada turno. Puede batear para poder, promedio, tiene una excelente vista. Es un paquete muy completo como bateador», agregó.
No pierde respeto ni valor:
Los Filis tenían previsto homenajear a Cabrera antes del choque contra sus Tigres de Detroit el miércoles. Como la mayoría de los peloteros en las rectas finales de sus carreras, el 12 veces invitado al Juego de Estrellas ha tenido problemas ofensivos en la etapa culminante. Tras sus primeros 31 cotejos del año, el aragueño sacudía para .202/.286/.253.
Sin embargo, nada de lo que pueda ocurrir este año cambiará la imagen que tienen jugadores y coaches a lo largo de la gran carpa sobre el paleador. En la plantilla actual de los Filis, varios peloteros tuvieron la oportunidad de compartir dugout con Cabrera en los Tigres, una experiencia que llevarán en el corazón por el resto de sus vidas.
«Es un tipo extraordinario. Es un gran oso de peluche, eso es lo que es», señaló Kody Clemens, hijo del exlanzador Roger Clemens y quien fue compañero del criollo en 2022. «Es genial, me encanta estar cerca de él. Muy gracioso, siempre con una sonrisa en el rostro. Por supuesto que fue genial estar en el mismo lineup que él«.
Ejemplo a seguir:
Mientras tanto, otro miembro actual de Filadelfia, Nick Castellanos, tuvo el gusto de salir a batallar junto al dos veces Jugador Más Valioso durante un tiempo mucho más prolongado. El guardabosques fue compañero de Cabrera en Detroit desde 2013 y hasta 2019.
«Fue una gran persona para ver e imitar cuando era apenas un chico empezando en las mayores«, recordó Castellanos. «No lo tomes muy en serio cuando te está yendo bien y tampoco lo hagas cuando las cosas están saliendo mal. Algunas veces hago un buen trabajo con eso, otras veces no. Él hizo un trabajo fantástico«.
¡Doblete de Miggy!
¡Doble 612 y hit 3.108 de Miguel Cabrera! #RepDetroit | #ElExtrabase. pic.twitter.com/koC9akeKca
— El Extrabase ⚾️ (@ElExtrabase) June 6, 2023Por su parte, el estelar Bryce Harper no llegó a compartir en el mismo equipo con el cuatro veces campeón bate, pero de igual forma agradece el hecho de que un pelotero de esa magnitud haya podido servir como ejemplo para él mientras daba sus primeros pasos en el deporte.
«He jugado en su contra en múltiples ocasiones. Es uno de los mejores jugadores que ha existido. Son 3.000 hits, 500 jonrones, Triple Corona, un Salón de la Fama seguro. Ha sido un placer ver lo que ha hecho. Pienso que muchos fanáticos en este juego deberían sentirse muy felices y afortunados de haber podido verlo hacer lo que hizo en su carrera. Es realmente genial», expresó Harper.