Willson Contreras conectó dos jonrones e impulsó seis carreras en la abultada victoria de los Cardenales de San Luis 16-8 sobre los Dodgers de Los Ángeles, el jueves, en el Busch Stadium. Una actuación que convirtió al venezolano en apenas el segundo receptor en la extensa historia de los pájaros rojos en combinar dichos guarismos, de acuerdo con MLB.com.
Contreras, que transita su mediática primera campaña con los plumíferos, se unió a Ted Simmons, miembro del Salón de la Fama de Cooperstown, quien en una oportunidad tanto en 1979 como en 1980, disparó y empujó tal cantidad de vuelacercas y rayas en un encuentro como careta. 43 años tuvieron que pasar para observar una actuación ofensiva similar.
“No podría estar más feliz por la forma en que se desarrolló esta noche, porque se sintió muy especial”, dijo el criollo a MLB Network tras el final del duelo. «Siempre trato de encontrar formas de mantener al equipo en marcha y no importa lo que cueste”.
Fue una jornada pletórica para los maderos de San Luis, que se unieron para despachar siete cuadrangulares, la mayor cantidad en un desafío como local para la organización desde 1940.
Un llamado especial para Willson Contreras
Contreras, de 31 años de edad, largó su primer estacazo de la velada frente al estelar lanzador zurdo Julio Urías, en la tercera entrada, con dos hombres en circulación para dar vuelta a la pizarra que hasta ese momento perdían los Cardenales 2-0. Fue un obús que recorrió 434 pies de distancia por el jardín central y alcanzó una velocidad tope de 109.4 millas por hora.
En el octavo episodio, el oriundo de Puerto Cabello repitió la dosis con un par de compañeros en las almohadillas, de nuevo por la pradera del centro, con una profundidad de 404 pies y a 108.1 mph en velocidad de salida. Al llegar al dugout, fue llamado por la afición de casa por segunda vez en su carrera (primera desde 2016 con los Cachorros de Chicago) para recibir una sonora ovación.
“Este año es un poco diferente por mí mismo”, expresó Contreras. “Soy todo diferente y cuando hago algo bueno, trato de transmitirlo y traer buena energía».
El carabobeño dejó su línea ofensiva en .256/ .343/ .429, con cinco bambinazos y 24 fletadas luego de sus primeros 43 encuentros en el ruedo.