Es normal que Shohei Ohtani se presentara, una vez más, como el jugador más seguido rumbo a la temporada 2023. Ningún pelotero puede hacer lo que el fenómeno japonés hace día tras día y su extraordinaria actuación en el Clásico Mundial de Béisbol con el campeón Japón ratificó su estatus de figura principal de la disciplina en la actualidad. Con eso dicho, si existiera un premio al jugador más entretenido en las primeras jornadas de la temporada 2023 de las Grandes Ligas, nadie lo merecería tanto como Ronald Acuña Jr.
El venezolano está de vuelta. Eso no solo quiere decir que regresó de un largo receso invernal, sino que el «Abusador» recuperó la salud que estuvo ausente durante el último año y medio. Después de la cirugía en la rodilla derecha que le impidió disputar la mayor parte de la campaña 2021 y que dejó secuelas en su juego durante todo el torneo anterior, el jardinero de los Bravos de Atlanta finalmente se siente al 100% de sus condiciones otra vez.
Seis compromisos en la actual contienda han sido más que suficientes para responder la pregunta de qué versión de Acuña Jr. pueden esperar los aficionados de los Bravos en 2023. El nativo de La Sabana ha bateado, ha lanzado, ha corrido y ha fildeado como pocos pueden hacerlo. Como él no pudo hacerlo por mucho tiempo.
A toda velocidad desde el arranque:
El guardabosques ha comenzado el primer inning con imparable en cinco de sus primeros seis cotejos del año, incluyendo un hit dentro del cuadro en el desafío de los Bravos el miércoles contra los Cardenales en San Luis. En esa jornada, Acuña Jr. conectó otro indiscutible en el cuarto acto y anotó desde la primera almohadilla con un doble de Matt Olson.
«Acuña está en un buen lugar», le comentó el mánager de Atlanta, Brian Snitker, a The Athletic después de dicho desafío. «El chico ama tener sus piernas (saludables) otra vez, te lo garantizo. Poder jugar este deporte de la forma en la que él quiere jugarlo. Estoy feliz por él, que pueda utilizar todas sus herramientas y habilidades. Ya sabes, jugar esta disciplina de la forma en la que está acostumbrado a hacerlo, que es a full capacidad», agregó.
Entre los cinco incogibles que tiene el criollo en el primer inning hasta ahora, hay dos hits dentro del cuadro y un cuadrangular. La única vez en la que no comenzó un juego con un indiscutible, llevó la pelota hasta la pista de seguridad.
Antes de la jornada de este jueves, el patrullero registraba una línea ofensiva de .370/.433/.630, con un doble, dos bambinazos, cuatro carreras empujadas y dos bases robadas en 27 turnos oficiales. Además, también tiene dos asistencias espectaculares desde los jardines, ambas en disparos certeros en la victoria del martes, cuando evitó por lo menos una carrera del rival.
«Es un jugador eléctrico. Me alegra que se esté sintiendo bien y completamente sano. Será un año emocionante para él», aseguró el también jardinero Michael Harris II.
El dolor es cosa del pasado:
Lo único que no se ha visto de Acuña Jr. hasta los momentos es la dificultad que mostró el año pasado para realizar ciertos movimientos, pues todavía presentaba dolor en su rodilla a la hora de rotar en la caja de bateo.
«Sí, es completamente diferente», explicó el guaireño. «Siento que el año anterior realizaba swings similares, pero no obtenía el resultado, bien fuera un jonrón o lo que sea, no me salía. Ahora siento que tengo la fuerza, por lo que si la conecto, consigo el resultado que deseo«.
El gran arranque de los Bravos (5-1) en la presente temporada ha tenido como protagonista principal al tres veces All-Star. El año pasado, por ejemplo, Atlanta no obtuvo su quinta victoria hasta su décimo encuentro del calendario y registraban un balance de 23-27, a 10.5 juegos de distancia del primer lugar de su división, a finales de mayo.
«El nivel de talento es ridículo«, señaló el lanzador Charlie Morton. «Quiero decir, solamente la forma en la que hace swing, lanza la pelota, cómo corre, es otro nivel. Cuando hace swing, es aterrador, porque como lanzador, él te ataca desde el primer pitcheo».