MotoGP: Álex Rins dio la campanada con su triunfo en Austin

Joiner Martinez
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Pecco Bagnaia, después de la pole positon y la victoria en el sprint, parecía el claro favorito para llevarse el triunfo en el GP de las Américas de MotoGP, tercera fecha del Mundial.

Tras un error del campeón del mundo, fue Álex Rins quien se llevó un impensado triunfo de Texas.

Bagnaia suele cometer equivocaciones que le cuestan muy caro. Como le ocurrió en la temporada 2022, en la que se terminó coronando, pero en la que también terminó en el piso varias veces.

Primera victoria de Rins en MotoGP

Pecco lideraba, con Rins no muy lejos, pero con cierta comodidad. Se trataba de seguir en pista hasta la bandera para sellar un triunfo que tenía en el bolsillo. Pero se fue al suelo y todo se terminó. Las caras en el box de Ducati mostraban la decepción enorme que causó un nuevo error de Bagnaia.

Tras el accidente, Rins heredó la punta y no falló para lograr su sexta victoria en la máxima categoría del Mundial, en un circuito que le cae muy bien: venció en Moto3 (2013), Moto2 (2016) y MotoGP, con Suzuki, en 2019.

Luca Marini batalló con Fabio Quartararo y fue segundo con la Ducati del equipo de Valentino Rossi. El francés, campeón 2021, completó el podio. Marco Bezzecchi, ganador de la Argentina, fue sexto y lidera la tabla.

Celebración en Honda

La victoria de Rins, que llegó con Marc Márquez ausente por lesión y tras las caídas de Mir, Nakajima y Bradl, pone de manifiesto que la Honda sigue siendo una moto competitiva.

Sobre todo en las características de este trazado americano en la que siempre ha ido bien y, muy especialmente, va a poner mucha presión a todos los pilotos de HRC a partir de ahora.

Honda no ganaba una carrera desde Misano 2021 con Márquez. Se esperaba más de Mir y de Nakajima y el que ha roto todos los pronósticos ha sido, precisamente, Alex.

Felicidad completa de Álex Rins

Tras su primera victoria como piloto Honda comentó «no voy a engañar. Cuando Pecco ha salido y ha empezado a tirar súper fuerte, el único sitio donde recuperaba, llevando la moto al límite por encima de los pianos, era en las chicanes. Me tiraba ahí como un loco para recuperar el primer y segundo sector. Me iba sacando un poquito en recta y aceleración y luego volvía».

Y tras la caída de su rival contó «cuando se ha caído, me he despistado un poco y he cometido un para de fallos, porque no había liderado todavía y pensaba por dentro: “¡Joder, como me pillen la hemos cagado!”. He empezado a tirar y seguir mi ritmo, así que muy contento y muy feliz».

«Hay que pisar con los pies en el suelo. Es sólo la tercera carrera y en Jerez volveremos a empezar de cero. A trabajar y a ver si podemos estar luchando» cerró el ganador en MotoGP.

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