El boxeador venezolano de 40 años, Ismael Barroso, perdió frente al estadounidense Rolando Romero en un combate por el título vacante del peso superligero de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) que el árbitro detuvo de forma controvertida en el noveno asalto.
Barroso había accedido a última hora a este combate debido a que el anterior poseedor del título, el dominicano Alberto Puello, dio positivo por clomifeno, una sustancia prohibida.
Puello fue declarado esta semana «campeón en receso» mientras se analiza una segunda muestra presentada por el dominicano.
Barroso, que iba a participar en otra pelea de la misma cartelera, tomó entonces el lugar de Puello y tuvo la segunda oportunidad de su carrera de pelear por un título mundial tras su derrota de 2016 ante el británico Anthony Crolla.
En caso de triunfo, Ismael Barroso se hubiera convertido en el décimo boxeador en conquistar un título mundial después de su cumplir los 40 años.
Polémica decisión en contra de Ismael Barroso
Ismael Barroso iba arriba en las tarjetas de los tres jueces al final de los ocho asaltos (Tim Cheatham lo tenía 76-75, David Sutherland 77-74 y Steve Weisfeld 78-73).
En el noveno asalto, Romero comenzó a conectar y derribó a su oponente, en lo que parecía más un empujón pero que el réferi Weeks señaló como una caída.
Pero lo peor de todo fue cuando detuvo el combate en un momento absolutamente extraño e inexplicable, con ambos púgiles lanzando golpes y sin que ninguno conectara.
Romero, que se estrenaba en el peso superligero (140 libras, 63,5 kg), no subía al ring desde que fue noqueado hace un año por el estadounidense Gervonta Davis.
Injusticia contra el venezolano
Ismael Barroso al terminar el combate declaró «estoy bien. Fue una injusticia que hayan parado la pelea. Yo estaba asestando los mejores golpes”.
«El primer derribo fue un empujón. No fue ningún golpe duro”, añadió el venezolano, quien llegó a la pelea con una racha de cuatro victorias.
Y cerró “el referí simplemente detuvo la pelea y no me dijo nada. Es evidente. Yo lo estaba lastimando (a Romero). Él no me dio ningún golpe certero. No comprendo por qué detuvo la pelea».
Por su parte, el vencedor expuso «les voy a ser honesto, (Ismael Barroso) es un guerrero y debieron haber permitido que continúe. Me dediqué a boxear de principio a fin. Comencé algo frío y me dieron duro, pero me levanté y seguí peleando como un campeón».
Tras el combate, Romero pidió una revancha ante Davis o un duelo ante Ryan García.
“Yo solamente quiero dos peleas. La revancha contra ‘Tank’ Davis y la opción todavía más grande: Quiero ir en busca de Ryan García”, señaló Romero.