Ser la mejor película de Marvel puede sonar a sacrilegio para muchos, pero a nivel cinematográfico Guardianes de la Galaxia Vol. 3 lo logra. Repito, nivel cinematográfico, no experiencia (este apartado es para Avengers Endgame). El cierre de los héroes más intrépidos del universo no podía ser de mejor forma y James Gunn se va de Marvel con una entrega emotiva, madura y un tanto oscura de la trilogía que comenzó como la más humorística del UCM.
Semanas después del especial de navidad, todos en Knowhere lucen tranquilos, menos Peter Quill, quien lleva en su mente y corazón la frustración por no tener a Gamora, y Rocket, quien guarda un secreto sobre su origen que no lo deja evolucionar. Mientras esto pasa llega una nueva amenaza del espacio que ataca directamente a Rocket y lo hiere de gravedad. Ahora los Guardianes deberán viajar por la galaxia para buscar al creador del mapache genéticamente modificado quien es el que tiene el secreto para salvarle la vida.
Pero, ¿por qué es la mejor de Marvel? Bueno la primera razón es que Guardianes de la Galaxia Vol. 3 no pierde tiempo en presentar y va de una vez a la acción. La cinta te mantiene en tensión durante las dos horas de metraje, pero a pesar que no presenta personajes, si estás entrando en el Universo Cinematográfico de Marvel (UCM) vas a entenderla sin necesidad de saber sobre las anteriores.
A nivel de guion y construcción de personajes esta película tiene drama, suspenso, humor, acción y otros géneros que están muy bien llevados. Si hablamos de personajes, ver el crecimiento dramático de Rocket, la redención Drax y Mantis, el conflicto de Star Lord y la emocionalidad de Nebula, es algo increíble que solo podía lograr James Gunn.
Guardianes de la Galaxia y su lado animalista
Guardianes de la Galaxia Vol. 3 puede funcionar efectivamente como una cinta activista en pro de los animales. En su premisa está muy adentrado el tema de la experimentación con animales y mientras pasa la cinta te sientes muy empático con los animales. Es algo que funciona sin hacer tantos discursos, solo que las acciones que suceden.
Y si hablamos de experimentos tenemos que hablar, sin duda, del villano de esta película, el Alto Evolucionador. Encarnado por el nigeriano-británico Chukwudi Iwuji este villano es de los más despiadados y sádicos de Marvel. El odio que logras desarrollar contra su personaje está totalmente justificado.
Fue una decisión muy importante darle el peso protagónico de esta película a Rocket. El mapache es uno de los personajes más complejos del UCM y aquí vemos su fragilidad tras un origen traumático que te rompe el alma. Al terminar de verla, si tienes mascota irás a abrazarla muy fuerte.
Pero tenemos que regresar a las razones que colocan a Guardianes de la Galaxia Vol.3 como la mejor película de Marvel. Esta cinta no es una experiencia como Endgame, una película que si te quitas el fanatismo podrás ver los huecos que hay en el guion que dura tres horas. Aquí no hay espacio para vacíos y el manejo de la música ayuda mucho en esto. El playlist que va desde Radiohead hasta Bruce Springsteen está quirúrgicamente seleccionado para funcionar.
James Gunn imprime mucho de su Suicide Squad en Guardianes de la Galaxia, así como también un dejo de Peacemaker. El director da una clase magistral de películas de superhéroes y muchos se preguntan sobre quién pierde más, Gunn o Marvel.
Aunque nada es perfecto y Guardianes de la Galaxia Vol. 3 tiene su punto bajo en Adam Warlock, pero está justificado. El personajes superpoderoso apenas está conociendo sus poderes y en esta cinta comienza como una fuerza imparable que aún no conoce todo su potencial. En el futuro será muy importante
Al final Guardianes de la Galaxia Vol. 3 le da un gran respiro a Marvel, pero hay que esperar lo que viene en el futuro del UCM, mientras hay que disfrutar y llorar con esta película que tiene unos momentos emotivos que hacen sollozar hasta al más rudo