Fede Valverde expresó los sentimientos que tuvo al enterarse que su último hijo no tenía muchas probabilidades de nacer.
A través de una carta abierta publicada por ‘The Players Tribune’, el futbolista contó lo que sufrió luego de que un doctor le diera un diagnóstico desafortunado a su esposa Mina Bonino.
“Un día, mi mujer fue a ver a su médico para hacerse unos estudios, y allí fue cuando el mundo se nos vino abajo. El doctor nos dijo que el embarazo estaba en un muy alto riesgo, y que había apenas una pequeña posibilidad de que mi hijo sobreviviera si el embarazo continuaba”, relató.
“‘Tu bebé probablemente no lo logre’. No puedo describir el dolor”, agregó el uruguayo cuando al inicio del embarazo no le dieron esperanzas de vida para el feto.
Fede Valverde reflexionó sobre su actitud
Federico Valverde explicó cómo su esposa sufrió la lamentable noticia que le dieron en un principio. Por su parte, él prefirió reprimir sus sentimientos, actitud que hoy día reconoce que no estuvo bien.
“Mi esposa estaba sufriendo física y psicológicamente cada día. Y yo es como que me encerré, me apagué. Yo soy alguien que suele guardarse todo. Sé que no está bien, pero así es como soy. No quiero que nadie me vea llorar, nunca. Ni siquiera mi familia”, recordó.
“Mis padres venían a cenar y mi madre me veía y decía: ‘Fede, mira que…’. Pum. Solo con eso ya no podía más. Y me levantaba de la mesa y me iba a mi habitación a estar solo. Las 20 horas por día en las que no estaba en el fútbol, me aislaba. Sin teléfono. Sin iPad. Sólo silencio”, añadió.
En definitiva, Fede Valverde describe que la experiencia que vivió fue un total “infierno”.
“Cuando estaba solo, me ponía a llorar durante horas. Me metía en el baño por 15 minutos, y en 10 me la pasaba llorando con la cabeza entre las manos. La mañana del partido, cuando en teoría tenía que estar concentrándome y tranquilo, estaba tirado en la cama, pensando en mi hijo, con la cabeza que me daba mil vueltas… Era un puto infierno”, contó.
El incondicional apoyo que recibió del Real Madrid
Afortunadamente, el centrocampista del Real Madrid aseguró que la tortura que estaba viviendo disminuyó un poco cuando su esposa hizo público el desafío que atravesaban. Por consiguiente, el apoyo que recibió de sus compañeros de equipo y los hinchas lo alentaron.
“Que mis compañeros y que los madridistas nos apoyaran como lo hicieron, es algo que nunca olvidaré. Tienen el respeto mío y de mi familia para siempre. Quizás erraba en un pase, y ellos respondían cantando mi nombre. En el Bernabéu, donde las expectativas siempre son altísimas, esto ya es un pequeño milagro”.
“Tener a 80.000 personas apoyándome de esa manera, en mi momento más bajo, se sentía como tener 80.000 abrazos. A todos ustedes… lo único que puedo decirles es gracias”, agregó.
Finalmente, el infierno para la pareja terminó cuando los doctores se dieron cuenta que el embarazo podía continuar sin problemas.
“Después de un mes y medio de un infierno absoluto, recibimos la mejor noticia de nuestras vidas. Las ecografías estaban mucho mejor, y por suerte parecía que el embarazo estaba en condiciones de continuar. Por supuesto, para llegar a término fue un periodo increíblemente tenso. Hasta que finalmente pudimos tener a nuestro hijo en los brazos, no queríamos ni respirar. Pero gracias a Dios, en junio, nuestro hijo Bautista llegó al mundo”, finalizó Fede Valverde.