La reanudación de la Ligue 1 trajo una gran sorpresa en el partido del Mónaco, un niño de de 17 años y 315 días llamado Eliesse Ben Seghir. Este adolescente fue la figura del triunfo (3-2) monegasco con un doblete ante Auxerre, la otra diana fue de Wissam Ben Yedder. Mientras que por el cuadro azul anotaron M’baye Niang, de penal, y Youssouf Fofana, en propia puerta.
Lo de Ben Seghir no es un hecho menor, ya que se convirtió en el jugador más joven en anotar un doblete en su debut la Ligue 1. Ni Thierry Henry o Kylian Mbappé habían inflado las redes con tanta precocidad en el campeonato francés. El récord era de Jean Deloffre (18 años, 10 meses y 12 días) con Lens y databa desde 1958. Una hazaña, más si se aprecia que su segundo tanto fue un golazo.
Flores para Ben Seghir
«No es una sorpresa para nosotros. Lo que demostró ante el Auxerre es lo mismo que venimos viendo de hace tiempo. No miro la edad de los jugadores. Si se lo merecen, juegan. Estoy muy contento con Eliesse (Ben Seghir), tiene un gran potencial», explicó Phillipe Clement, entrenador del Mónaco, sobre el nuevo prodigio. En la Ligue 1 apariciones así son naturales se vio con Eduardo Camavinga (Stade Rennes, ahora en Real Madrid) y Rayan Cherki (Olympique Lyon).
Clement agregó: «Sabía que podía aportarnos algo nuevo cuando le di entrada. Lo hizo rápido y bien». Mientras que su compañero, Rubén Aguilar, también le lanzó flores a Ben Seghir.»Huele a fútbol. No tiene nada que envidiar a nadie técnicamente. Ustedes lo han descubierto hoy, nosotros no. Simplemente nos hemos dado cuenta de que puede lograr un doblete así de rápido en Ligue 1″.
Neymar, ángel y demonio
Las noticias del día miércoles en la Ligue 1 fue la irrupción de Ben Seghir, pero también jugó el líder del campeonato, PSG. Sin Lionel Messi, pero con Neymar. El brasileño cuando está enchufado es capaz de dejar acciones geniales y como ante Strasbourgo, donde hizo un caño con una elástica. Pero también tiene su lado oscuro y también se vio en ese encuentro al irse expulsado por doble amarilla, la segunda por simular un penal, al minuto 62.
En ese momento del partido estaban igualados 1-1, tras dos tantos de Marquinhos, uno de ellos en propia puerta. El triunfo llegó de forma agónica, a los seis minutos de agregado, por la vía de un penal de Kylian Mbappé. A falta de las figuras sudamericanas, apareció el gran heredero del trono del fútbol mundial, como demostró en la Copa del Mundo de Qatar.