La temporada de los Dallas Mavericks parece estar llegando a su final mucho antes de lo pensado por propios y extraños. Luka Doncic y Kyrie Irving ven muy cerca no clasificar a playoffs y su número trágico es dos.
En otras palabras, si Oklahoma City Thunder, actual puesto 10 de la Conferencia Oeste, gana dos juegos o más, los Mavs estarán eliminados. ¿Qué posibilidades tienen de clasificar a la postemporada?
A Dallas le restan tres juegos, todos como local, frente a Sacramento Kings, Chicago Bulls y San Antonio Spurs. Por su parte, a OKC le falta la misma cantidad de encuentros pero solo jugará uno en casa (ante Memphis Grizzlies) y tendrá dos visitas (Golden State Warriors y los Jazz de Utah).
Los Mavericks deben ligar que OKC no gane más de dos juegos mientras que ellos tienen que ganarlos todos. La combinación de resultados los dejaría parados de la siguiente manera:
- Si Dallas gana tres juegos, OKC solo puede ganar uno
- Si Dallas gana dos, OKC debe perder todos sus juegos restantes
- Los Mavs NO pueden ganar solo uno
- En caso de que OKC gane dos partidos, Dallas estará eliminado
La decisión que precipitó el caos en Dallas
Ante este panorama de, prácticamente, no perder más, los Dallas Mavericks debían llevarse la victoria en su visita a los Atlanta Hawks para estar menos presionados. Pero esto no ocurrió y hubo una decisión que los acercó más al abismo.
El tiempo de juego estaba por culminar, el duelo estaba igualado a 130 por lado y la pelota la tenía Trae Young. Kyrie Irving decidió ir a por el robo de balón y terminó llevándose por delante a Young. ¿Resultado? Falta personal, y como estaban en colectivas, dos tiros libres con el reloj casi en cero.
De esta manera, los Hawks cavaron un poco más el hoyo de la temporada de unos MAvs que no rindieron con la pareja Doncic – Irving y que entraron en franco descenso desde el NBA All-Star Game.