Hay cinco jugadores que calzan para Jugador Más Valioso de la temporada 2022-2023 en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional. Solo tres caben en la planilla de los electores. Por eso es un ejercicio desafiante: porque hay más candidatos que renglones en el tarjetón.
Remuerde la conciencia excluir de la boleta a Maikel García y Oswaldo Arcia. García, como campocorto de los Tiburones de La Guaira tuvo OPS de .942, séptimo en el campeonato y soberbio si se toma en cuenta que tomó 201 turnos (quinto). García fue segundo en anotadas (48), quinto en hits (65), cuarto en dobles (13), líder en triples (5). Siendo primer bate se ubicó undécimo en impulsadas (33) y quinto en bases alcanzadas (100). Además, fue segundo en robos (10), noveno en promedio (.323), sexto en OBP (.444) y décimo tercero en slugging (.498).
Arcia fue campeón en OPS (1.137), estadística que mide qué tan completo, cuán integral es un bateador; fue colíder en cuadrangulares (11), producidas (44) y slugging (.661); tercero en OBP (.476). Promedió para .323 y se apuntó 39 carreras creadas, con OBP ponderado de .484, todo esto mientras jugaba buena defensa en el right. Se necesitan muy convincentes argumentos para preferir a otros tres.
Y los hay. La temporada de José “Cafecito” Martínez ofrece muy buenas razones para apuntarlo en la papeleta
El toletero derecho de los Tigres de Aragua finalizó tercero en OPS (.1002); fue subcampeón bate (.390), cuarto en OBP (.451), quinto en slugging (.551), segundo en carreras creadas (45,7), líder en hits (73), octavo en dobles (12), undécimo en carreras impulsadas (33), cuarto en bases alcanzadas (103). Su OBP ponderado fue de .441.
Este premio debería llamarse Jugador del Año y recompensar, sin mayores disquisiciones ideológicas, al pelotero de mejor rendimiento individual ¿Por qué anteponer entonces a Martínez sobre Arcia, si el outfielder de los Leones del Caracas dibujó mejores números?
La respuesta es que las cifras de Martínez son casi tan imponentes como las de Arcia (tuvo mejor promedio, más carreras creadas, más hits, más dobles, más bases alcanzadas) y más difíciles de sostener, por cuanto compiló 44 apariciones más que el leñador anzoatiguense. Cuando el menú de estadísticas es similar, los detalles marcan diferencia y toca desempolvar el concepto tradicional del Más Valioso, esto es, el pelotero más determinante para que su equipo alcanzara sus objetivos. Y cuesta imaginar a los Tigres entrando a la postemporada (así sea de sextos) si Martínez no se los hubiera echado al hombro en diciembre, cuanto remolcó quince carreras y tuvo OPS de 1.201, con .466 de promedio y .530 de OBP. La verdad es que cualquiera de los dos podía estar entre los tres primeros. En este caso se optó por Martínez.
Las cualidades de Más Valioso de José Rondón
Medio peldaño por arriba de ellos está José Rondón, de los Leones del Caracas, con sus 11 bambinazos (colíder), 53 anotadas (líder), 115 bases alcanzadas (puntero), 48.2 carreras creadas (primero), 43 impulsadas (segundo), .575 de slugging (segundo), .994 de OPS (cuarto), 66 hits (tercero), 12 dobles (octavo), .330 de promedio (séptimo) y .419 de OBP (undécimo).
Rondón es el Productor del Año y además asumió la responsabilidad de proteger el jardín central, sin ser esa su posición natural. Lo hizo adecuadamente, tanto que no cometió errores, ni en el center ni en ninguna de las otras cuatro posiciones que le cubrió a los melenudos. Un jardinero central aceptable con los números ofensivos que tuvo Rondón, quien además fue adaptable al campo y capaz de ganar bases adicionales con las piernas, es candidato a Más Valioso por donde se le mire.
No es el ganador porque en esta temporada existió Freddy Fermín, un regio catcher defensivo que además bateó sobre .400, mientras jugaba de principio a fin.
El ganador
Reiteraremos lo que se escribió sobre Fermín en una columna anterior: Fermín marcó un hito en la Liga: nunca antes un jugador que disputó la mayoría de sus partidos como receptor ganó el título de bateo. El bolivarense lo conquistó con promedio de .404. Solo seis antes de él dominaron la estadística con average de .400 o más.
La receptoría es la posición más demandante del beisbol. Toma mucho trabajo y sacrificio ser buen catcher. A los enmascarados les queda menos tiempo que a los demás para perfeccionar su ofensiva. Por eso un careta que le pegue bien a la bola es un ser mitológico. Fermín es mucho más que alguien agachado durante más de tres horas, lo cual es bastante decir. El grandeliga de los Reales de Kansas City reunió las tres bondades que caracterizan a los grandes de su gremio: buen brazo, destreza con la mascota y sabiduría para conducir a los pitchers.
Fermín eliminó a casi dos tercios de quienes pretendieron robarle bases. “¡No le corran a Freddy Fermín!”, colgaban en las redes del Caracas cada vez que un pillo caía fulminado. Solo incurrió en tres errores y un pasbol durante 252 lances. Y condujo al pitcheo del Caracas a ser el menos bateado de una zafra en la cual achicharraron a los lanzadores.
Números históricos
Fermín fue apenas el séptimo pelotero capaz de ganar un título de average con promedio de .400 o más (.404) y el primer campeón bate que disputó la mayoría de sus compromisos en la receptoría. Terminó segundo en OPS (1.048) y tercero en carreras creadas (45,3, según el portal pelotabinaria.com.ve).
Su porcentaje de embasado ponderado o WOBA (que asigna valores distintos a las diferentes formas de embasarse para que hacerlo por jonrón no pese igual que anidar en las almohadillas por boleto o sencillo) fue inmenso: .459.
Súmenle a todo esto su comportamiento. Fermín fue uno de los jugadores más trabajadores y disciplinados del club, un ejemplo silencioso y una influencia positiva.
Freddy Fermín puede ser considerado el pelotero más útil, más diferenciador del torneo. Aristócrata en la defensa y el ataque, aportó en grande al Caracas, que lo echará de menos en el Round Robin. Fue el Jugador del Año, el Más Valioso, la individualidad más subrayable del campeonato 2022-2023.