El extraño, pero exitoso caso de Willians Astudillo

Jose Angel Rodriguez
Jose Angel Rodriguez
Foto: @MLBTR
4.8
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Willians Astudillo es una rara avis en el beisbol profesional de la actualidad. No es un hombre atlético, pero en Grandes Ligas defendió todas las posiciones menos el campocorto. Tampoco se puede decir que sea una persona dada para hablar a la prensa, aunque la oficialización de su firma en Japón desató una oleada de despedidas por parte de periodistas estadounidenses.

El barcelonés es un hombre versátil y carismático sobre el terreno, y eso le bastó para ganarse el afecto de fanáticos de Caribes, Mellizos y Marlins. Claro, es que de un pelotero solo se pide eso: que sea rendidor y él ha sabido serlo.

Mucho se ha dicho que Astudillo nunca se poncha, y es verdad. En un deporte actual donde los bateadores más buscados y cotizados son los sluggers que sean capaces de conectar muchos jonrones, aunque se abaniquen con igual frecuencia, él supo ganarse un lugar en la Gran Carpa siendo lo contrario. Su tasa de guillotinas fue de 4.8 % en las cinco temporadas de travesía al máximo nivel del Norte, cuando el promedio es de 22.4 %.¿La de vuelacercas? Fue de 2.7 % para él, con una tasa de 3.2 % para el resto, no demasiado distante.

El premio de Willians Astudillo

«La Tortuga», como se puede preveer, no es rápido sobre las bases, pero en su único intento de robo como ligamayorista en 188 juegos, tuvo éxito. Tampoco hace envíos veloces sobre la loma, labor que le tocó asumir en innings finales durante varias oportunidades en las últimas zafras, aunque su envío de 39.8 millas por hora el 25 de julio con Miami contra los Rojos, sea el más lento registrado para propiciar un dobleplay durante la era Statcast. Es decir, Astudillo no es el mejor en nada, pero cumple en todo.


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El periodista Jon Heyman, del New York Post, señaló días atrás el acuerdo económico de Willians Astudillo con los Halcones de Fukuoka. Tendrá $ 1,35 millones de dólares garantizados, con posibilidad de incentivos que harían duplicar el pacto. Lo que significa percibirá, cuando menos, el doble del salario mínimo del Big Show, que era el que le había correspondido a lo largo de su trayectoria como grandeliga.

«Estoy muy emocionado por esta oportunidad. Sé que la NPB es una liga de alto nivel, pero estoy listo para trabajar tan duro como pueda. Los fanáticos no me conocen todavía, pero quiero asegurarles que soy un pelotero que disfruta mucho el béisbol y que siempre trabaja duro”, dijo en un comunicado del club, difundido por el portal web especializado beisboljapones.com.

Lo de Astudillo es una rareza en los campos que se disfruta, pero sobre todo, se agradece.

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