La bonita historia de dos hermanos haciendo batería en el béisbol profesional de Venezuela llegó a otro nivel el jueves por la noche, cuando David Ramos tomó la pelota para el compromiso inaugural de los Leones del Caracas en la Serie del Caribe. Detrás del plato, tal como ocurrió durante la postemporada de la pelota local con los Tigres de Aragua, estaba Wilson, su hermano mayor.
Ante una asistencia 35.691 aficionados, récord para un juego de Serie del Caribe en su etapa actual, David dominó a los Federales de Chiriquí, representantes de Panamá, durante la mayor parte de sus cinco entradas sobre el ruedo.
«Tenemos una buena relación de hermanos», aseguró el lanzador en la rueda de prensa posterior al juego, que terminó con victoria para el Caracas de cinco carreras por dos. «Wilson lo que me dijo fue que siguiéramos trabajando de la misma manera en la que lo hicimos durante los playoffs. Ataca a los bateadores, trata de lanzar los envíos en donde te los pido y confía en mí«.
Esa confianza rindió sus frutos. David se llevó el triunfo al permitir solo tres hits y dos carreras (una limpia) en su tiempo sobre la lomita, en el que además sumó cuatro ponches y regaló un boleto.
Hermanos Ramos en buenas y malas:
Su único episodio realmente exigente fue el segundo, cuando dos sencillos consecutivos, un pasaporte y un rodado que llevó a un error del torpedero Orlando Arcia permitieron que los panameños tomaran ventaja momentánea en el marcador.
«Logré mantenerme en el juego y nunca perdí el enfoque por las dos carreras. Wilson me dijo que me tranquilizara, que ellos ya hicieron lo que iban a hacer y que siguiéramos trabajando en la locación de los pitcheos. Gracias a Dios se dieron las cosas», comentó el nativo de Guacara.
Si bien el derecho ya venía de una gran temporada regular en Venezuela con los Bravos de Margarita, en donde no tuvo la compañía de su hermano en lo absoluto, Ramos reconoce que, más allá del lazo sanguíneo que los une, la simple experiencia de Wilson como careta es de mucha ayuda para cualquier lanzador.
«Esa ha sido la clave. He localizado los pitcheos en donde me los pide», continuó el brazo. «Le tengo mucha confianza, es un receptor que tiene bastante experiencia y que sabe llevar muy bien el juego. Sin duda esa es la clave del éxito que hemos tenido, tanto en los playoffs como hoy (jueves). La locación de los pitcheos», sentenció.