La temporada 2022-2023 de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP) llegó a la mitad de su camino, pero los Tiburones de La Guaira ya pueden sentirse ganadores. En décadas, la divisa litoralense no se había mostrado con tanta confianza, seguridad, jerarquía. El responsable de este escenario no es más que el general del “ejercito” de La Guaira: César Collins.
“Hoy el espectáculo es de la afición, del equipo, no es de Collins, es de este ejército, como les digo yo, porque son demasiados los que se sumaron a esta bonita iniciativa, a este proyecto que hoy por hoy está dando su 100% para que esta organización cambie la cara”, contó César Collins a Sello Deportivo, previo al esperado encuentro del 23 de noviembre, donde Ronald Acuña Jr. jugó su primer duelo completo en el béisbol profesional venezolano.
En esta campaña, el gerente general de Tiburones ha logrado reunir a un gran número de actuales militantes de las Grandes Ligas en su roster: Ronald Acuña Jr., Juan Yépez, Ángel Zerpa, Maikel García, Carlos Sánchez, Ehire Adrinaza… y sí, se esperan unos cuántos más. Aunados a un grupo de peloteros con vasta experiencia en el pasado en el Big Show y en la LVBP.
Los guairistas viven un sueño
El line up de Henry Blanco, coronel del ejército de Collins, es de ensueño para la fanaticada guairista que vive a plenitud su momento, ese que tanto anhelaron.
“Lo tenemos todo”, se escuchaba en las tribunas del estadio Jorge Luis García Carneiro de Macuto, en el que no quedó un asiento vacío. Los fanáticos sienten tanta seguridad y alegría, que ya quedaron atrás los polémicos movimientos, en temporada muerta, que hicieron dudar a muchos, como el caso del traspaso de José “Cafecito” Martínez a Tigres de Aragua, jugador insigne de la institución, junto a su hermano Teodoro.
Y es que la sola presencia de Ronald Acuña Jr. resetea casete y hace sentir ganador a cualquier ejército. Bastaba con ver las caras de ilusión y alegría de centenares de niños viendo incrédulos a la estrella de los Bravos de Atalanta mostrar un corrido de bases impecable y anotar la primera carrera del encuentro, tras su primer turno. Sin contar la emoción indescriptible que expresaron tras el único hit que conectó Acuña aquel 23 de noviembre en su estado.
“Es hora de disfrutar del encuentro y de Ronald Acuña, de su forma de jugar, que no la va a cambiar, esa forma de disfrutarse el encuentro que tanto les gusta a los fanáticos. Lo mismo vemos de Néstor Molina, que también tiene una forma bien particular de gozarse sus pitcheos. Eso es parte del espectáculo, debemos entender que el béisbol ha cambiado un poco. Tenemos que verlo como un show, con armonía, con esta hermandad”, preciso el joven gerente de La Guaira.
Yépez se estrenó entre samba y calor guaireño
Aunque aquella parecía una mágica noche para Tiburones, fueron vapuleados por lo crepusculares, actuales líderes de la tabla de clasificación, pero eso no impidió que la samba, la parranda y la algarabía reinaran en Macuto. Así de alegre fue el estreno en la LVBP de Juan Yépez, el prospecto de los Cardenales de San Luis que se graduó de bigleaguer en la reciente temporada de las Grandes Ligas.
“Desde que tengo uso de memoria jugar aquí, en mi país, siempre fue un sueño para mí, sobre todo jugar con los Tiburones de La Guaira”, fueron las palabras de Yépez, para Sello Deportivo, el día de su debut. “Es un placer estar debutando frente a mis amigos y mi familia, en una organización que está haciendo tanto esfuerzo por un nuevo cambio”.
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El outfielder de 24 años de edad conoce a Acuña desde niños. Ambos firmaron en julio 2 de 2014, con los Bravos de Atlanta. Sin embargo, en 2017, Yépez llegó a San Luis, equipo que cuatro años después le hizo los honores de graduarse en el mejor béisbol del mundo.
“Es un honor debutar en Venezuela al lado de Acuña, darles ese show y poder estar aquí jugando nuevamente juntos”, precisó Juan Yépez, que se mantendrá con el equipo hasta mediados de diciembre, según confirmó Collins a Sello Deportivo.
En definitiva, como mencionó Carlos Valmore Rodríguez, tras el anuncio de la fecha de debut de Gleyber Torres, “jugar esta temporada en el béisbol profesional venezolano se ha vuelto contagioso”, ese virus, sin duda, lo terminó de propagar Acuña, el jugador de los 100 millones de dólares que Venezuela está teniendo el privilegio de ver jugar en su tierra, gracias al trabajo arduo del “ejercito” de Tiburones.
“Esto es un regalo para Venezuela, somos privilegiados de tener a peloteros de las Grandes Ligas jugando por primera vez en su casa, en su tierra. Va más allá de Tiburones de La Guaira, es un logro para Venezuela, demostramos al mundo que podemos tener a jugadores de alta jerarquía en nuestra liga, sin ningún tipo de riesgo y con mucha alegría”, sentenció Collins.
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