Cermeño: «Me siento cómodo como volante mixto»

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El mediocampista tiene un rol más goleador / Cortesía
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Los caminos de la vida y del fútbol son inescrutables. A principios de año, Carlos Cermeño no tenía club. Ahora va jugar la final con Metropolitanos. El oriundo de Maturín es uno de los volantes con mejor pie de la última década de la Liga Futve. En su currículo tiene una estrella: Deportivo Táchira (2014-15). Sí, la del 93’10 de Wilker Ángel ante Caracas en el Clausura y luego ante Trujillanos. Este domingo buscará la segunda en su carrera contra el equipo del estado que lo vio nacer.

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«Para mí es especial jugar a otra final, me siento orgulloso. Que mi trabajo sea vea reflejado dentro de la cancha con resultados. Bastante contento con llegar a este club, luego de vivir momentos difíciles a principios de año, que no tenía equipo», dijo Cermeño, a Víctor Gómez, de Sello Deportivo. El monaguense le ha dado un salto de calidad a los violetas, aparte de colaborar con exquisita técnica en la circulación de la pelota.

Un Cermeño con gol

El volante llegó por el visto bueno de José María Morr, que le ha encontrado lugar en el engranaje de esa máquina llamada Metropolitanos. «Él (Morr) es la cabeza de esto. No de esta temporada, sino de años atrás. Consolidó un sistema de juego, un funcionamiento y se ve reflejado en que vamos a jugar la final el domingo», analizó Cermeño.

El oriental suma cuatro dianas esta campaña, su segundo mejor registro goleador junto a la temporada 2015. Solo infló las redes más veces, a nivel de liga, en el curso 2019, que anidó cinco tantos.

Mucha de estas buenas cifras surgen de posición en el campo. «Por el sistema que aplicamos, nos toca jugar un 4-3-3 y hago de volante mixto. Me piden llegar al área y me siento cómodo en esa función», expuso, Cermeño, más acostumbrado a estar en la base de la jugada que como finalizador. Pero Metropolitanos ha aprovechado su buena pegada y le cubre la espalda Christian Larotonda, para no perder el equilibrio.

Un joven veterano

Todavía le quedan muchas temporada de buen fútbol en los tacos de Cermeño, pero hace rato que dejó ser un juvenil. Es uno de los futbolistas con más kilometraje y su deber es transmitir ese conocimiento a los talentos más bisoños del violeta.»Todos pusieron su granito de arena dentro de la cancha. Con la experiencia que puedo tener, aporté. Crecimos y la defensa hizo un excelente trabajo. Ganamos partidos importantes, como el de Maturín, que fue la clave para llegar a esta final», reflexionó el oriental.

En cuanto al manejo de un escenario inédito, soltó: «Todos sabemos lo que nos estamos jugando, algunos no han jugado finales, pero tienen alguna idea de que es un partido de detalles. Como toda final será un encuentro cerrado». Cermeño concluyó con una opinión del rival. «No digo que nos habíamos planificado, pero sí teníamos en la cabeza que el rival podía ser Zamora. Termina siendo Monagas, que es un gran equipo, con bastante oficio. Pero nosotros contamos con el plus de jugar como locales», sentenció.

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