Luego de retirarse del balompié, Gareth Bale ahora está dedicado al golf, pero reconoció que la sensación vivida en los campos del torneo ProAm de Pebbe Beach no la había experimentado en su carrera como futbolista.
El galés completó su primer recorrido en el green con un -2 sobre el par del campo y un +100 en nervios.
«Estoy acostumbrado a jugar frente a 80 mil espectadores, pero el golf es totalmente diferente. Estoy fuera de mi zona de confort, estuve nervioso», comentó.
A Bale le tocó jugar con Joseph Bramlett, ganador de un torneo en el PGA (Korn Ferry Tour Championship, 2021). Se habían conocido la semana anterior, pero al exjugador del Real Madrid le impresionó compartir el recorrido.
«Es un jugador de clase mundial. Con solo ver a estos jugadores puedes aprender cómo se ocupan del juego, cómo hacen su trabajo. Fue agradable de ver, fue fantástico jugar con él», contó.
El exfutbolista celebró la gran organización del ProAm de Pebble Beach, torneo considerado el mejor del mundo en este formato. «Trato de jugar lo mejor que puedo. Es una gran experiencia. Es alucinante lo bien que está organizado este torneo. Todo es impecable. Es muy divertido».
La carta de Bale
“Me siento increíblemente afortunado de haber logrado el sueño de dedicarme al deporte que amo. Me ha dado algunos de los mejores momentos de mi vida. Momentos muy buenos y momentos malos en 17 temporadas que son imposibles de repetir, me depare lo que me depare el futuro”, escribió el expreso de Cardiff en redes sociales sobre su carrera en clubes.
“Desde mi primer toque con el Southampton hasta el último con Los Angeles, y todo lo que ha pasado entremedias, ha resultado una carrera que me llena de orgullo y gratitud. Jugar para mi país en 111 ocasiones es un sueño hecho realidad”, agregó Bale, que se acordó de los clubes donde militó. El galés acotó: “Ahora paso página con ganas de ver el próximo capítulo de mi vida. Es un momento de cambio y transición, una oportunidad para una nueva aventura”.