Desde 2020 se viene realizando con un formato y sede fija el torneo de campeones en España, que en teoría siempre había situado en enfrentamiento al ganador de la Liga y Copa del Rey y en esta ocasión tendremos un Superclásico.
Una realidad normal y común en cualquier país futbolero del mundo que ha cambiado su enfoque y agrandado su abanico a un modo Final Four que añade a los dos primeros clasificados de la Liga local y los finalistas de la Copa, un formato abierto a cambios por si se repiten los equipos en cada escenario; y si fuera poco también ha girado su rumbo en cuanto lugar a Arabia Saudita, país en el que se disputará la competición por lo menos hasta 2029 debido al acuerdo firmado por ambas federaciones, un método que genera sin duda ganancias económicas pero déficit en cuanto a la posibilidad de ver aficionados de cada club en los estadios saudíes, un sentimiento que poco a poco reduce su valor lastimosamente.
Un superclásico poco prometedor por su actualidad deportiva
Sin ánimo de demeritar los millones de espectadores que normalmente apartan un espacio para ver el partido más importante del fútbol mundial, es evidente que el nivel de expectación desde la partida de Messi y Cristiano en el superclásico ha reducido sus cartas de favoritismo como entretenimiento deportivo, abro excepción para decir que el cara – cara Benzema vs Lewandowski es atractivo.
Ambos equipos vienen de vencer a través de los lanzamientos desde el punto penal, teniendo que pasar por el suspenso absoluto para asegurar su puesto en la final.
Real Madrid no atraviesa su mejor momento en gran parte porque aún no aterrizan de Qatar algunos de los internacionales que disputaron el mundial, tuvo dificultades ante Valencia que al verse en contra en el marcador pudo empatar y hasta tener chances claras para dejar por fuera de cualquier opción; el conjunto ‘merengue’ no encuentra su estado de forma contando con bajos rendimientos de varias de sus estrellas como Tchouaméni, Modric, Vinicius y Valverde.
En cambio, quien regresó a gran nivel fue Benzema, el líder y capitán del equipo con 4 goles en 3 partidos tras el retorno de las competencias.
“He vuelto de lesión porque tenía una lesión. He hecho un buen trabajo para regresar a mi nivel y tocar el balón marcar asistir. Hacer mi juego. Estoy de vuelta y estoy feliz y ojalá pueda ayudar a mis compañeros. Significa muchas cosas. Otro trofeo y otro orgullo. En el Madrid siempre nos piden ganar y mostrar que estamos aquí para llevar la copa a Madrid. En nuestra cabeza tenemos que estar listos para ganar” Karin Benzema en rueda de prensa.
Por otra parte, el club catalán líder del campeonato español dejó en el camino al Real Betis en un partido equilibrado con goles (3-3) hasta los 30 minutos suplementarios, los de Xavi siguen caminando por la cuerda delgada y con constantes cuestionamientos por querer aplicar un juego o su filosofía poco rentable en balompié moderno, sobre todo porque aquel Barca del sextete tenía actores impecables e idóneos para la idea cultural e histórica en suelo azulgrana.
“Sí me preocupa. Siempre hay cosas para mejorar. Siempre hay errores y tratar de ser mejores. Hicimos 60 minutos muy buenos y a partir de ahí el Betis nos dominó. Hay que ser más agresivos. Es diferente al partido de Liga. Intentaremos controlar las transiciones. Intentaremos desarmarles en defensa que son muy fuertes. Aún así no varía mucho de lo de octubre” Xavi Hernández en conferencia de prensa.
Los números del superclásico en su 7ª final por Supercopa Nacional
Será la séptima vez que se verán las caras por esta competencia, con saldo en las 6 finales anteriores a favor del Real Madrid por tener 4 victorias frente a las 2 de su máximo rival, Barcelona. Mientras que el historial general está igualado pero con leve ventaja para ‘los blancos’ en los 249 partidos en total:
. 101 victorias del Real Madrid (417 G.F)
. 51 empates
. 96 victorias del FC Barcelona (406 G.F)
El partido se jugará este domingo a partir 21:00 Hora Local (España).