El segundo ciclo de Jorge Sampaoli culminó con Sevilla, luego de caer 2-0 en Getafe por Liga y estar comprometido con salvar la categoría. En Europa League cumplió la tarea y se plantó en los cuartos de final, donde se medirán a Manchester United. Pero el mensaje del polémico e incendiario DT, que en 2020 estuvo ligado a la Vinotinto, no llegaba al camerino hispalense. “Hace tiempo que no seguimos la línea para mejorar. Jugamos con anarquía y dependemos de la suerte”, declaró Bono, portero de Sevilla, en un claro dardo para Sampaoli. A dos puntos del descenso, la directiva decidió cortar con la relación.
El DT arribó a Sevilla, para iniciar un segundo ciclo, en la séptima jornada de la Liga, tras la salida de Julen Lopetegui, quien tenía el apoyo de Monchi, reconocido director deportivo. En ese momento los hispalenses estaban a un punto del descenso. Luego de 21 fechas después, el cuadro andaluz nunca hizo suya la idea del estratega. Dese las oficinas hasta el camerino, todo era nervios. Un elenco que se acostumbró a jugar Champions, que se pasea por el acantilado. El argentino fue la opción de emergencia tras las negativas de Rafa Benítez o Marcelino García Toral.
Hay cifras que son lapidarias como que Sevilla no sabe lo que es sumar en la carretera desde el 15 de octubre, cuando doblegó (1-0) ante Mallorca. Eso se traduce en cinco caídas y tres empates. «Hace tiempo que los dirigentes del club habían dejado de creer en Sampaoli. Un entrenador que transmite un enorme nerviosismo a los jugadores, que ordena una salida del balón desde atrás con el portero de mucho riesgo y cuyo mensaje no llega a los futbolistas, que ya no se cortan en público a la hora de plasmar que no entienden lo que el técnico les pide», escribió Rafael Pineda, en el diario El País.
Carta de despedida Sampaoli
«Sevilla es el primer equipo en mi carrera en el que intento una segunda oportunidad. Y puedo certificar que, pese a que las circunstancias fueron diferentes, mi cariño por este escudo no se rompe y continúa siendo enorme», destaca el técnico argentino, quien se va «con la cabeza alta por la actitud en todos los momentos», escribió el entrenador en redes sociales, sobre el cierre de su segunda etapa con Sevilla.
El oriundo de Casilda agregó: «Me voy con la cabeza alta por la actitud en todos los momentos, porque estamos en cuartos de final de Europa League y porque nos esforzamos muchísimo para sacar esta historia adelante. El fútbol no siempre nos devuelve con alegrías el insomnio que le dedicamos. Pero no tengo dudas de que valió la pena ofrecer y poner el corazón por este escudo. Quiero agradecer a los jugadores y a cada empleado del club por habernos acompañado. No tengo dudas de que lograrán el objetivo».
«Monchi» como padre de los problemas
Ramón Rodríguez Verdejo, popularmente conocido como «Monchi», fue el gran artífice de los éxitos de los andaluces en el siglo XXI. Sin embargo, el fracaso del ex Universidad de Chile con Sevilla también tiene su sello. En verano trajo como grandes figuras a: Isco, Kasper Dolberg y Adnan Januzaj. Ninguno sigue en la actual plantilla. “Me he equivocado mucho, sin duda, pero este año todo lo que puede salir mal sale peor”, soltó Monchi en Turquía, para el choque ante Fenerbahçe.
La salida del argentino es cara para Sevilla. Alrededor de unos 11 millones de euros, porque tenía contrato vigente hasta 2024. Pineda reseñó: «El Sevilla lleva presentando pérdidas económicas de más de 20 millones de euros desde el 2021. Su política de vender a los mejores jugadores para fichar jóvenes futbolistas y poder venderlos para generar plusvalías lleva casi tres temporadas en el olvido». El sustituto del argentino será José Luis Mendilibar. Con el apoyo de tres viejos conocidos en la plantilla: Marko Dmitrovic, Joan Jordán y Bryan Gil; intentará rescatar los muebles en 12 jornadas.
