Además de cerrador, Alzolay se establece como líder dentro de los Cachorros

Andres Espinoza
Andres Espinoza
The Associated Press
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Adbert Alzolay ha sido descrito por miembros de los Cachorros de Chicago como un conector de personas. Luego de pasar apenas algunas semanas con el venezolano, el mánager Craig Counsell, por ejemplo, se mostró lo suficientemente confiado hace días para asegurar que el relevista posee «características reales de liderazgo«, gracias a la forma en la que interactúa con aquellos a su alrededor.

Al escuchar esas palabras de su mandamás, Alzolay solo puede sonreír, así como también lo hizo tras enterarse de que algunas personas lo ven como un «puente» que evita que se formen grupos aislados dentro del clubhouse del equipo. La sonrisa se debe a que ese siempre ha sido su objetivo, en especial cuando veteranos como Jon Lester y Yu Darvish le mencionaron desde temprano que veían potencial en él.

«Me lo dijeron», indicó Alzolay, en declaraciones para el portal oficial del combinado. «Puedes ser un líder con lo que haces, no solo en el terreno de juego, sino por cómo tratas a la gente, cómo conectas con todos, con los chicos en los camerinos, con los encargados del clubhouse, con los preparadores del terreno. Siento que tomé eso. Lo adopté», añadió.

Personalidad como carta de presentación

Alex Suárez, el director de desarrollo de jugadores internacionales y de operaciones de los Cachorros, jugó un papel importante en la firma de Alzolay al profesional en 2012. La poderosa recta del diestro y sus efectivos envíos quebrados eran llamativos, pero Suárez también quedó enganchado con la personalidad del serpentinero.

«La confianza fue, posiblemente, el factor más impresionante y que destacó con él«, indicó Suárez. «Estaba enfrentando a un grupo de jugadores mayores que él y no tenía ningún tipo de miedo».

Esa confianza en sí mismo quedó demostrada incluso fuera de las líneas de cal. Cuando Alzolay llegó a los Estados Unidos se trazó la meta de aprender inglés. El nativo de San Félix contó que nunca tuvo temor de pronunciar alguna palabra de forma incorrecta, porque siempre estuvo seguro de que sus compañeros, que tenían ese idioma como nativo, lo ayudarían.

Es el mismo mensaje que Alzolay le ofreció a un grupo de jugadores de ligas menores de Chicago que completaron el viernes el programa de inglés que tiene el conjunto.

«Les dije que siempre tenemos miedo de cometer errores. No lo tengan. Los compañeros de equipo te ayudarán a mejorar con el idioma, pero necesitamos tener la voluntad para acudir a ellos e iniciar conversaciones. Les dije que así es cómo crean el lazo. Así es cómo consigues que todos se conecten en el clubhouse», explicó.

Una energía particular de Alzolay

La habilidad que tiene Alzolay para hablar dos idiomas, junto con una personalidad que pareciera inyectar energía en aquellos cerca de él, lo ayudaron a formar amistades con jugadores de distintos lados del mundo a medida que iba ascendiendo por las granjas de los oseznos.

Ahora, como un ligamayorista establecido, el derecho espera seguir ayudando a otros para que puedan disfrutar del proceso tanto como él.

«Es alguien que tiene una gran relación con todos los que forman parte del clubhouse», reveló el camarero Nico Hoerner. «Muchos tipos se limitan a los que son jugadores de posición o los lanzadores. Es algo natural que sea así. Los relevistas hacen sus propias cosas, lo que está bien. Pero tener personalidades como la suya que sirven de puente para personas desde todos los distintos lugares, pitchers y jugadores de posición, es realmente genial. Y además está el hecho de que ha estado con los Cachorros por un largo tiempo. Pienso que es muy significativo de verdad«, añadió el paleador sobre su compañero.

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